Psicosomática y dolor

Psicosomática y dolor

Medicina psicosomática y psicoterapia: una alianza necesaria

La relación entre afecciones del cuerpo y la mente se ha estudiado desde la Edad Media. Actualmente, existen ramas de la medicina completamente dedicadas a esto, como la medicina psicosomática y la psicología médica. Así, se ha logrado identificar la relación entre determinados síntomas somáticos con los procesos mentales, acotando las opciones de tratamiento más adecuadas para cada paciente.

De este modo, los profesionales deben capacitarse, es recomendable realizar formaciones como una maestría en psicoterapia de tiempo limitado donde se han estudiado ampliamente y trabajado de la mano con médicos para tratar aquellas enfermedades que se manifiestan físicamente, pero cuyos síntomas son causados o agravados por factores mentales.

Cuáles son los síntomas psicosomáticos más comunes y sus causas

Las condiciones psicosomáticas son variadas y dependen en muchos casos del individuo. De acuerdo con la Fundación América de Médicos de Familia, entre un 5% y un 7% de la población general sufre en algún momento de síntomas somáticos, de los cuales entre un 20% y un 25% desarrollan una enfermedad somática crónica.

Los síntomas más comunes son fatiga, insomnio, dolores musculares, tensión alta, disnea u otras afectaciones en el sistema respiratorio, náuseas, indigestión o diarrea, dolores de cabeza, disfunción eréctil, dolor o sensación de presión en el pecho, dermatitis, fiebre y ulceras estomacales.

Los motivos exactos sobre el porqué las afectaciones psicológicas se manifiestan físicamente son desconocidos. Sin embargo, entre las explicaciones más comunes está el hecho de que el cuerpo humano bajo estrés genera una respuesta llamada frecuentemente “pelear o huir”, la cual genera cortisol y adrenalina. Estas por si solas no son perjudiciales, pero en exceso pueden ocasionar malestar físico.

Asimismo, se sospecha que hay un componente genético que puede aumentar las posibilidades de sufrir síntomas somáticos si existen antecedentes familiares.

Además, la presencia de desórdenes de la ansiedad, depresión y trastornos de la personalidad, así como sufrir experiencias traumáticas o pasar por un periodo de duelo también se han identificado como factores de riesgo. Además, es posible que el individuo no se percate de cómo estas emociones están afectando su salud física.

Tratamiento de las enfermedades psicosomáticas

En primer lugar, es necesario acudir a un médico que determine si, efectivamente, el origen es sólo orgánico.  Una vez que se realizan los exámenes pertinentes, descartando una causa anatomopatológica que explique el cuadro o enfermedad, el médico debe remitir al paciente a un psicólogo especialista.

Dentro de la psicoterapia, es común recurrir a la terapia cognitivo-conductual puesto que permite cambiar los comportamientos que pueden estar afectando la salud física del paciente. Por ejemplo, a través de esta es posible aprender a manejar el estrés de manera saludable y así reducir los síntomas físicos.

También es factible que el psicoterapeuta aconseje al paciente acudir a un psiquiatra que recete medicamentos que pueden ayudar a reducir los síntomas psicológicos y, por ende, los físicos.

Aun así, los psicólogos recomiendan que la terapia no sea el único tratamiento puesto que los síntomas somáticos son reales y deben ser monitoreados por un médico. De esta manera, en algunos casos, si el paciente experimenta dolores musculares se les puede recomendar tomar analgésicos. Del mismo modo, si sufre de problemas estomacales, mientras la terapia muestra resultados, se puede tomar medicina para estos.

Actualmente, también es posible encontrar grupos de apoyo para pacientes afectados por enfermedades somáticas, especialmente aquellos diagnosticados de manera crónica. El apoyo ha demostrado ser crucial para la recuperación, ya que este puede ayudar a reducir el estrés.

Es importante reconocer que los síntomas somáticos son igualmente reales. El hecho de que sus causas sean psicológicas no significa que los dolores sean imaginados. Por lo tanto, parte de la labor tanto de médicos como de psicoterapeutas ha sido la divulgación de información para asegurarse de que el público reconozca el tratamiento de las enfermedades psicosomáticas.

Leave a Reply

Your email address will not be published.